Después de que nos haya llegado la imagen de más arriba (desconocemos su autor) queremos hacer hincapié en el fondo de la cuestión a la que se refiere.
Con toda la prudencia que la situación requiere y con todas las dudas que podemos tener (dado que lo que hoy es blanco, mañana es negro y pasado mañana azul), quisiera hacerme eco de este comentario y añadir alguna cosa más.
De todos los sectores afectados por al coronavirus, que son prácticamente la totalidad, la Hostelería genera empleo para casi dos millones de trabajadores en España. Supone el 6,2% del PIB nacional (año 2019). Pues bien, siendo como es uno de los sectores que más recursos y tiempo dedica a la higiene de sus locales, observamos cómo se nos ha convertido (por informaciones sesgadas y por desconocimiento absoluto de buena parte de las noticias de los medios de comunicación) en el punto de mira de los telediarios, de la sociedad y de las medidas restrictivas del Gobierno.
Pocos sectores emplean tantos recursos como la Hostelería, en velar por que se cumplan los requisitos que las autoridades sanitarias demandan, en no pocas ocasiones dando “palos de ciego”. Observo como los camareros limpian las sillas y mesas, las barras de sus establecimientos, tercian para que se respeten las distancias de seguridad, disponen de gel hidroalcohólico en la entrada de sus establecimientos, etc. etc. etc.
Pues bien, a la hora de aplicar las primeras medidas restrictivas, ha sido en este sector donde las autoridades han puesto su foco. Horarios, aforos y demás normativas que afectan, ÚNICAMENTE, a la Hostelería del país. No vemos que se hayan cerrado los cajeros de los bancos (¿quién limpia los teclados de los mismos?). No vemos que exista un plan de higiene sanitaria en los medios masivos de transporte (¿quién limpia las barras de los metropolitanos con la asiduidad que un camarero limpia los sillones del bar?). Ayer estuve en el Hospital y no vi que nadie limpiase los asientos donde los usuarios esperan su turno: uno se levanta y otro se sienta.
Concluyo con lo que quiero subrayar: NO puede ser la Hostelería quien “pague el pato” de tanta desinformación. Me consta de la preocupación de los profesionales de la misma y de la entrega y cuidado con el que velan por respetar las medidas dictadas por las autoridades sanitarias. Pero hágase un protocolo común -donde debe estar presente la patronal de los Hosteleros y no llevarle un plan redactado en un despacho sin contar con los mismos- y respétese por todos los sectores que conlleven la reunión de personas. NO cabe dictar normas para quedar bien “en la foto” y permitir que otros muchos sectores -a ver qué acaba sucediendo con el tema de la enseñanza- tengan unos protocolos mucho más laxos.
Tenemos que extremar precauciones TODOS. Nos estamos jugando muchísimo en el envite. Sanitaria y económicamente. Que, de una vez por todas, los protocolos se realicen de forma consensuada entre todas las partes afectadas. Y predomine la cordura, el rigor científico y el sentido común, en lugar de los titulares que se buscan en la prensa.
#FuerzaBar